Cómo realizar una aplicación portable en nuestro sistema

La solución óptima para los programas portables - GONZOfoto

Un programa portable es el que no requiere ningún tipo de instalación, pudiendo ser ejecutado en cualquier ordenador cuyo sistema operativo sea el mismo bajo el cual se ha generado la aplicación portable, es decir, un programa portable creado en Linux debe ser ejecutado en máquinas Linux, del mismo modo que uno creado en Windows solo podrá ser ejecutado en ordenadores de ese mismo entorno operativo. Por otro lado, un programa portable es más ligero que uno estándar, al no precisar de librerías añadidas (*.dll) para su funcionamiento.
Conviene dejar claro que la creación de un programa portable no es un acto de piratería, siempre que su uso se circunscriba al ámbito personal y no se pretenda su distribución masiva a través de redes P2P o por cualquier otro cauce.
De hecho, Microsoft Windows, desde que lanzó la versión XP hasta la actual Windows 7, pone a disposición del usuario la herramienta necesaria para hacer una réplica portable de cualquier aplicación previamente instalada, al objeto de ser utilizada desde cualquier ordenador.

Utilidad de las aplicaciones portables:
 
Generalmente, las aplicaciones portables o portátiles se copian en un pendrive o en cualquier otro dispositivo portátil de almacenamiento y basta con hacer doble click sobre el icono para ejecutarla con toda normalidad. Además de otras significativas ventajas son de gran utilidad, en especial para aquellas personas que se ven obligadas a desplazarse entre distintas oficinas o delegaciones de su empresa o para cualquiera que desarrolle su actividad profesional en un ámbito de continua movilidad geográfica.
Dejando a un lado la portabilidad, también es una solución muy a tener en cuenta para aquellos que necesitan ahorrar el máximo espacio libre en su ordenador.
Pero eso no es todo. La portabilidad de un programa significa que se dispone de una aplicación mucho más ligera, con un aspecto del interfaz y un nivel de funcionalidad idéntico al programa original. Y lo más importante, es que para su ejecución no precisa de instalación alguna y, consiguientemente, ni el disco duro ni el registro del sistema, sufren ningún tipo de modificación.

Crear una aplicación portable mediante Iexpress

A continuación, a modo de tutorial esquemático, se enumeran los pasos a seguir para generar una versión portable con la utilidad Iexpress, a partir de un programa ya instalado.

1. Pulsar sobre el botón de Inicio de Windows (abajo a la izquierda) y seleccionar Ejecutar.
2. En la ventana ejecutar se escribe “Iexpress”. El programa Iexpress aparece en pantalla y se selecciona la primera de las dos opciones disponibles.
3. En la siguiente pantalla se vuelve a seleccionar la primera opción: “extraer ficheros y ejecutar comando de instalación”.
4. En el siguiente paso se asignará un nombre al programa portable.
5. A continuación se selecciona la primera de las dos opciones: “no prompt”.
6. En la siguiente pantalla se puede elegir si al ejecutar la aplicación, se desea que se muestre o no el número de licencia del programa. Al tratarse de un portable, se puede prescindir de esta opción seleccionando: “Do not display a license”.
7. A continuación, se añadirán todos los ficheros que contenga el directorio o directorios del programa que se desea hacer portable.
8. Después, habrá que seleccionar el fichero ejecutable que lanza el programa, por ejemplo, si estamos convirtiendo en portable la aplicación Microsoft Word, se seleccionará el ejecutable Word.exe.
9. En el siguiente paso se elige la opción recomendada por defecto. La primera de ellas.
10. Se puede prescindir, a continuación, de dejar un mensaje tras la extracción de ficheros seleccionando: ”no message”.
11. En la siguiente pantalla se pulsará el botón examinar para determinar el lugar donde se desea ubicar el programa portable. El escritorio de Windows puede ser una buena localización. De las dos opciones que aparecen abajo, se selecciona la primera de ellas.
12. En “Configure restart”, se selecciona la tercera opción: reiniciar el sistema en caso de que sea necesario.
13. “Save Self Extraction Directive” es la última parte del proceso, en este punto se selecciona la segunda opción: “Don´t save”.
14. Todo listo. Se procede a la creación del programa.

Existen otros procedimientos para convertir en portable cualquiera de las aplicaciones instaladas en un entorno Windows, pero debido a su simplicidad y facilidad de manejo, Iexpress parece ser, con diferencia, una de las mejores opciones a considerar para lograr este objetivo.

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